miércoles, 16 de agosto de 2023

Cuando sobran las palabras

 


CUANDO SOBRAN LAS PALABRAS


Sucedió una mañana. Me desperté con la incómoda sensación de que nada encajaba. No sabía por qué: había dormido bien, sin sobresaltos ni pesadillas, no padecía ningún malestar físico, pero me sentía desapacible; algo así como una profunda amargura que me oprimía. Salí de la cama y fui a preparar el desayuno. Me movía en cámara lenta. Encendí la radio. Mientras apuraba los copos de maíz, avena y trozos de frutas, fui recorriendo, como de costumbre, las distintas emisoras (no es cuestión de aceptar así como así una sola versión de los hechos). ¡Cuántas imbecilidades, por favor! Periodistas, analistas políticos, columnistas, panelistas, locutores y locutoras recitando un rosario de sandeces, banalidades, falsedades, lugares comunes, todo ello revestido con un halo de análisis político. Nada nuevo, pero esa mañana estaba más intolerante que lo habitual. Tomé una ducha, me vestí con lo primero que encontré a mano, apagué la radio y salí. Era un día brillante, diáfano que, sin embargo, no pudo disipar la niebla amarga que me envolvía.

Entré al bar de la esquina, a pocos metros del edificio donde vivo, no porque tuviera un particular deseo de consumir algo, sino porque deseaba demorar el momento de afrontar mis obligaciones laborales. Pedí un café.

Y allí estaba, sentado a la mesa junto a la ventana, taciturno, con la vista perdida en la calle rumiando mi pesadumbre. En eso, una niña de unos seis, siete años y su madre, tomadas de la mano, pasaron caminando ante el ventanal. La pequeña me miró, me sonrió y me saludó agitando su mano. Le respondí del mismo modo. Las seguí con la vista hasta que desaparecieron tras la fachada del local. De inmediato llamé al mozo, pagué el café y abandoné el lugar. Sonreía. El día había cobrado sentido. 

domingo, 28 de mayo de 2023

¿SENSIBILIDAD O HIPOCRESÍA?


 

 

 ¿SENSIBILIDAD O HIPOCRESÍA?

Décadas atrás, carros tirados por caballos transportando distintos tipos de carga, formaban parte del escenario cotidiano en la Ciudad de Buenos Aires.

Después de cuantiosas campañas llevadas a cabo por organizaciones no gubernamentales en contra del maltrato animal, se prohibió la tracción a sangre en los principales centros urbanos del país, entre ellos, obviamente, CABA.

Aquel escenario, intrascendente para los habitantes de la época, hoy generaría el repudio airado, cuando no reacciones violentas, por parte de la burguesía citadina.

A primera vista, esta actitud podría interpretarse como la expresión de una sociedad sensible, cuyos valores humanitarios han prevalecido sobre una práctica, otrora considerada natural, en la que el ser humano se erige como la especie dominante por sobre todas las demás que habitan el planeta. Una sociedad que, ahora, podría proclamar con orgullo: «¡hemos evolucionado para mejor!».

Pero... ¿es realmente así? Permítanme no suscribir tan a la ligera esta afirmación. Se dice que el camino al infierno está empedrado de buenas intenciones. Y es que, ¿realmente somos mejores? ¿Mejores que quién? ¿Mejores que nuestros antecesores, porque ellos, seres desalmados, se valían del caballo para impulsar sus carros, aún cuando los vehículos motorizados ya colmaban nuestras calles? ¿Eran, por ello, peores personas que las que las del presente?

domingo, 14 de mayo de 2023





Un lujo de escritura e ironía en este texto extraído de la novela Casa Desolada de Charles Dickens. 

"El señor Vholes [abogado] es un hombre muy respetable. No tiene mucho trabajo, pero es un hombre muy respetable. Los abogados más importantes, que han hecho grandes fortunas o están a punto de hacerlas, reconocen que es un hombre respetabilísimo. En su trabajo nunca pierde una oportunidad, lo cual es seña de respetabilidad. Es reservado y serio, lo cual es otra seña de respetabilidad. Tiene problemas digestivos, lo cual es muy respetable.

lunes, 20 de febrero de 2023

Casa Desolada; Charles Dickens

 


Casa Desolada

"Jamás podrá haber una niebla demasiado densa, jamás podrá haber un barro y un cieno tan espesos, como para concordar con la condición titubeante y dubitativa que ostenta hoy día este Alto Tribunal de Cancillería, el más pestilente de los pecadores empelucados que jamás haya visto el Cielo y la Tierra"

jueves, 26 de enero de 2023

Tutorial para gustar de un helado


TUTORIAL PARA GUSTAR DE UN HELADO

 

«Vaya estupidez —pensarán muchos con solo leer el título—. Desde que tengo uso de la razón como helados, y este tipo pretende instruirme cómo hacerlo. Uno más que quiere hacerse famoso escribiendo en la Web».

Entiendo y acepto la crítica, yo tampoco me detendría a leer consejos sobre cómo comer una porción de pizza o una milanesa, así pues, siéntase libres de abandonar la lectura en este punto.

Pero antes de que tomen una decisión apresurada, me permito sugerirles que consideren la alternativa de distraer solo unos pocos minutos para incursionar en el tortuoso terreno al que ingresamos desde el mismo instante en que nos decidimos a comprar un helado. Y no exagero, ese simple acto nos somete a un cúmulo de conflictos físicos y emocionales, sobre los cuales no tomamos consciencia porque, siéndonos tan familiares, los abordamos de un modo irreflexivo, como veremos a lo largo de estas líneas.

Una consideración previa. El presente tutorial está destinado exclusivamente a quienes consuman helados servidos en cucurucho. Los fieles a los recipientes de telgopor, las tulipas de barquillo ondulado o los vasos en general, no encontrarán nada útil en el texto.

 Vayamos entonces a lo nuestro.

domingo, 1 de enero de 2023

Érase una vez El Bajo

 

 


  

ÉRASE UNA VEZ EL BAJO

CRÓNICAS DE BUENOS AIRES

 

Es esta la historia de un acontecimiento en una ciudad que ya no existe.

El Bajo era el apodo que los habitantes de Buenos Aires adjudicaban a la extensa franja paralela a las aguas del Río de la Plata, que se extiende desde Retiro hasta La Boca, de tan solo dos cuadros de ancho donde las calles describen una pronunciada pendiente hasta desembocar en el puerto de la Ciudad.

En la actualidad, el tramo norte de dicha franja ostenta el nombre de Catalinas Norte, denominación que le otorga un atributo de respetabilidad mucho más apropiado con las actividades que allí se realizan.

En efecto, debido a su cercanía con la City porteña, hacia fines de los 60’s, del siglo pasado —maravilloso, la idea de siglo pasado remite a épocas remotas, y, sin embargo, podemos hablar de experiencias vividas a mediados de dicho periodo—, se inició un proceso de urbanización con la construcción de edificios de oficinas, tendencia que cobró vigor particularmente durante los años 90. Hoy dominan allí edificios y torres de fachadas vidriadas en los cuales sentaron sus reales las casas matrices de muchas de las principales compañías del país. Pueblan sus calles autos de lujosas marcas, junto a hombres y mujeres luciendo atuendos propios del mundillo corporativo.

Pero no siempre fue así.

miércoles, 23 de noviembre de 2022

El muro de silencio

 



EL MURO DE SILENCIO

CRÓNICAS DE BUENOS AIRES

 

 

Sucedió en un bar del barrio de Palermo entre las once y once y treinta de la mañana. Una pareja joven, de unos treinta años, tal vez menos, ingresa al local y ocupa una mesa junto al ventanal que da a la calle. Esperan en silencio que los atiendan. Al cabo de varios minutos, durante los cuales no intercambian palabra alguna, se les acerca una moza y les entrega sendos menús. Realizan sus respectivos pedidos. Tampoco hablan entre sí mientras esperan el servicio.