miércoles, 20 de julio de 2022

EL PRECIO DEL AMOR

 


EL PRECIO DEL AMOR

CRÓNICAS DE BUENOS AIRES

 

En principio quisiera despejar falsas expectativas; el apunte no trata sobre el costo que demanda recurrir a una prostituta, sino a uno de los tantos gastos que debe afrontar un varón para mantener relaciones sexuales o hacer el amor (eufemismos[1] que se suelen emplear para referirse a coger, fifar, follar, echarse un polvo, etcétera) con su pareja: novia/novio, esposa/esposo, amiga/amigo con derechos o una simpatía circunstancial. Como sea, llámenlo como quieran. ¿Por qué será que todo lo referido al sexo se reviste con términos ‘supuestamente correctos’?